Si hay algo que me tomo en serio en esta vida es el postres de Canadá.
No importa dónde esté en el mundo, siempre encuentro una manera de probar lo mejor que los locales tienen para ofrecer.
Y si hay un lugar que sabe hacer un buen postre, ese es Canadá.
Amigo mío, prepárate, porque después de leer este texto querrás correr a un aeropuerto y aterrizar directo en una panadería canadiense.
Tarta de mantequilla – Postres de Canadá
Empecemos con la favorita de todos: la tarta de mantequilla.
Imagínate un pastelito delicado, crujiente por fuera y con un relleno cremoso que rebosa con cada bocado.
Este es el tipo de postre que parece sencillo, pero cuando lo pruebas tienes ese momento de revelación: “¿Dónde ha estado escondida esta maravilla toda mi vida?”
A los canadienses les encanta esta tarta y entiendo perfectamente por qué.
Y ahí surge una eterna discusión: ¿las tartas de mantequilla deberían tener un relleno más espeso o más líquido? ¡Me gustan ambas formas, así que puedes enviarme uno de cada una!
Nanaimo Bar: Un trocito de cielo en capas
Ahora bien, si te gustan los postres en capas, Nanaimo Bar te conquistará desde el primer bocado.
Este clásico proviene de Nanaimo, Columbia Británica, y tiene tres capas perfectas: una base crujiente con galletas y nueces, una crema de mantequilla en el medio y, encima, una capa de chocolate que se derrite en la boca.
Lo sé, sólo hablarlo hace que te entren ganas de tomar un trocito.
Este es uno de esos postres que se comen lentamente, disfrutando de cada textura.
O devoras todo de una vez y luego miras tu plato vacío con esa tristeza existencial.
BeaverTails: Porque la comida frita también puede ser sofisticada
Nos gustan los dulces fritos, ¿verdad? Bueno, Canadá ha llevado este concepto al siguiente nivel con BeaverTails.
El nombre es curioso porque significa “cola de castor”, pero no os preocupéis, aquí nadie come castor.
En realidad es una masa frita, similar a un churro plano, cubierta con todo lo que puedas imaginar: canela y azúcar, Nutella, trozos de galleta, fresas, mantequilla de cacahuete…
En resumen, ¡hay algo para todos! Probé uno con glaseado de arce y casi lloré de la emoción.
Jarabe de arce – Postres de Canadá
Hablando de arce, no podía dejar de mencionar el favorito de Canadá: el jarabe de arce.
Si crees que la miel o el caramelo son las cosas más dulces y sabrosas del mundo es porque aún no has probado esta belleza.
Se lo ponen a todo: panqueques, waffles, helados e incluso platos salados.
Y mira, tiene sentido.
El sabor es inconfundible, en su punto justo de dulce y con un toque amaderado que lo hace todo más especial.
Si vas a Canadá y no pruebas el jarabe de arce directamente de la fuente, puedes decir que no has estado allí.
Conclusión: Canadá es un dulce paraíso
Después de todo esto, creo que está claro que Canadá no se anda con rodeos cuando de postre se trata.
Ya sea que te gusten las delicias cremosas, crujientes, fritas o bañadas en jarabe de arce, hay una opción esperando para conquistarte.
Ahora dime ¿cuál de estos postres probarías primero? O mejor aún ¿cuándo estamos planeando este viaje gastronómico a Canadá?









































